El término industria 4.0 se refiere a una visión de la fabricación más ‘inteligente’, informatizada y con todos y cada uno de los procesos interconectados gracias a herramientas como el Big Data. La meta es emplear las nuevas tecnologías TIC para prosperar la administración de la eficiencia energética y sostenibilidad de los procesos operativos del negocio.
Y en este marco se abarca la eficiencia energética, que en el ámbito industrial se presenta de una importancia vital pues se trata de uno de los grandes usuarios de consumo de energía. Las compañías requieren reducir su coste energético de sus cuentas de explotación para poder posicionarse mejor en un mercado tan competitivo.
Hoy día, la mejor manera de contar con una gestión de la energía eficaz es la implantación de un Sistema de gestión energética (SGE) que deja contar con de una administración continuada en el tiempo, aspecto fundamental en el ámbito industrial donde existe un sinnúmero de variables que influyen en el consumo energético, que además de esto son activas disponiendo de consumos estacionales muy heterogéneos.
Norma ISO 50001
La ISO 50001 es la regla que certifica los Sistemas de gestión energética en el mundo entero. Garantiza que el sistema de gestión energética implantado en nuestra industria es eficiente.
Cada empresa es diferente y por esta razón, el sistema de gestión energética que se establezca debe amoldarse a sus necesidades y estructura. El propósito esencial de la ISO 50001 radica en permitir un ciclo de mejora continua de la eficacia, los costos de la energía y la emisión de los gases efecto invernadero para luchar contra el cambio climático.
Este estándar se puede aplicar en cualquier clase de empresa, independientemente de su tamaño, ámbito o bien localización geográfica.
Las claves para el éxito de un buen Sistema de gestión energética (SGE) en industria 4.0
Implicación del personal de negocio
Solo si existe implicación a todos y cada uno de los niveles en la estructura corporativa, la compañía va a ser capaz de implantar un SGE eficaz que deje cumplir objetivos. Va a ser preciso crear y regular conjuntos de trabajo multidisciplinares, mentalizar a los trabajadores de la compañía con campañas de medidas de ahorro energético, etc…establecer metodologías de trabajo, aun a veces contar con de un departamento que coordine estas tareas y que trabaje codo con codo con la empresa de servicios energéticos.
Expertise en Gestión Energética
Es totalmente imprescindible en cualquiera de sus formatos, de manera interna o externa en la industria. De nada vale, contar con de las herramientas de tratamiento y procesamiento de datos si los análisis no son interpretados y analizados por personal cualificado.
Trabajo metódicamente ordenado y coordinado
Es esencial contar con una metodología de trabajo, estable, ordenada y eficaz, basada en objetivos y metas energéticas, para esto va a ser preciso asignar un responsable que coordine todos y cada uno de los trabajos.
Red de instrumentalización en planta
Por fortuna el ámbito industrial cuanta con una fuerte red de instrumentalización en toda la maquinaria que componen sus líneas de producción. Con las nuevas tecnologías como el Internet of Things (IoT), esté despliegue de sensores de campo se prevé más intensivo con la meta de poder agregar factores y variables relevantes y que influyen de manera directa en el consumo energético.
Plataformas de procesamiento de la información.
La cantidad de información, Big Data, que se recibe de los diferentes procesos precisa ser procesada por herramientas y tecnologías que sean capaces de procesar dicha información. Estas herramientas han de ser flexibles, escalables y versátiles para dar cobertura a todas y cada una de las áreas de negocio de la compañía y lograr una gestión energética o bien una mayor eficiencia energética industrial.
Aplicar algoritmos de aprendizaje de forma autónoma y predicción que van a ayudar reducir el consumo energético de forma sustentable y de la manera más eficaz y viable posible.
Field Services
Plataforma que ayuda a la gestión de las tareas en campo, por ejemplo, tareas de mantenimiento preventivo que aportan grandes ventajas a la eficiencia energética industrial y rendimiento de las máquinas industriales.
Por qué apostar por la eficiencia energética en industria
Es una forma de tomar conciencia
No podemos mejorar en eficiencia energética sin ser previamente conscientes de cómo estamos utilizando la energía que gastamos. Utilizando la captura y procesado de los datos más fiables y representativos de nuestro consumo energético, podemos realizar una evaluación del grado de eficiencia actual.
Gracias a la implantación de la Norma ISO 50001 podemos conocer también el gran potencial en materia de ahorro energético y económico que tienen las empresas.
Mejoramos la competitividad
La optimización del consumo energético de nuestra compañía nos permite ofrecer los mismos productos o servicios a un menor coste económico. De este modo, el margen de beneficio aumenta y con ello, nuestra competitividad.
Gracias al IOT o Internet de las cosas, conectamos nuestras máquinas y sistemas de producción optimizando de este modo nuestros costes. Además, logramos mejorar la calidad de nuestros productos y generamos un sistema de fabricación inteligente que también repercutirá en nuestra eficiencia energética de forma directa, haciéndonos por ello más competitivos.
Eficiencia energética = Ciclo de mejora continua energética
Las medidas que se implantan en un sistema de gestión energética nos permiten generar un ciclo de ahorro que no va a ser puntual sino continuado. Cada una de las mejoras de eficiencia energética propuestas se cuantifica energética, económica y medioambientalmente, permitiéndonos medir su repercusión en tres ámbitos distintos.
Cuidamos del medio ambiente
Un sistema de gestión energética industrial adecuado genera resultados claramente medibles y cuantificables. Además de suponer una fuente importante de ahorro para la empresa, reduce sus emisiones de gases contaminantes a la atmósfera.
Disminuimos nuestra dependencia energética
España es un país con una clara dependencia energética. Si logramos reducir el gasto energético de la industria, estaremos disminuyendo al mismo tiempo la dependencia que tenemos del exterior.
El gran valor de la Industria 4.0 se encuentra en establecer una visión general de la industria. Gracias a la transformación digital de las empresas, obtenemos un diagnóstico con el que implementamos los procesos que nos llevarán a mejorar nuestro mantenimiento inteligente, eficiencia energética y competitividad en todos los ámbitos de nuestra actividad.
Integración de los criterios de desempeño energéticos en la planta. Definición junto con la dirección operativa de los objetivos y metas del sistema de gestión que servirán de base para los planes de acción a nivel técnico, organizativo y a nivel de personal.
El objetivo final es convertir el Big Data energético de la industria en el “dato útil”, dato que ayudará a la dirección de la empresa a tomar decisiones estratégicas para reducir su consumo y hacer más competitivo su negocio.
La implantación de la norma ISO 50001 supone una oportunidad para descubrir y aprovechar el potencial de ahorro en materia de energía que tiene nuestra empresa y definir prácticas y comportamientos futuros para mantener un alto nivel de eficiencia.